martes, 13 de noviembre de 2012

Los Álvarez de Toledo Zapata


Francisco Álvarez de Toledo y Zapata cuenta con una calle  en el toledano barrio de Azucaica. De ascendencia conversa, nació en Toledo en 1452. 

Francisco Álvarez, maestrescuela de la catedral de Toledo, y hombre de confianza del cardenal Mendoza. Francisco Álvarez de Toledo, maestrescuela de Toledo e igualmente hermano del secretario, no se libró de la Inquisición en 1486, cuando ocurrió el proceso de los judaizantes del monasterio de la Sisla, pues su propio hermano fray García Zapata lo acusó de ser cómplice de sus delitos, aunque después, antes de que lo quemaran, se desdijo. Francisco fue procesado de nuevo en 1505, permaneció preso y con sus bienes secuestrados durante largo tiempo. En 1507, se dictó su sentencia absolutoria.

Hijo de Juan Álvarez de Toledo y Catalina Zapata, 

Hermano del secretario de los Reyes Católicos,  Fernando Álvarez de Toledo, señor de Cedillo, muere en 1504

Se doctoró en Derecho Eclesiástico y en Derecho Civil, marchando después a Roma donde gozó de la amistad personal de los cardenales Mendoza y Cisneros, quienes delegaron en él para sus tomas de posesión de la sede toledana en 1485 y 1493, respectivamente. Trabajó en la conversión de los moros de Granada y acompañó al cardenal Cisneros en la conquista de Orán, llegando a ser su vicario general.

A su regreso a Toledo consiguió del Papa Inocencio VIII la bula Etsi nos, fechada el 7 de mayo de 1485,  por la que se le facultaba para fundar y organizar un colegio de escolares para clérigos pobres, especialmente los adolescentes que sirvieran en la Catedra. Para ello cedió sus propias casas y otros beneficios,   y lo puso bajo el título y la advocación de Santa Catalina.

Fue el primer colegio-seminario de España, estableciéndose al lado de la parroquia de San Andrés. 

Nombró al rector y estableció los estatutos, consiguiendo por la bula de 22 de febrero de 1520  que el Papa León X elevara el Colegio al rango de Universidad Pontificia con derecho a conferir grados académicos.

En su testamento de 7 de diciembre de 1520 nombra por patrono del Colegio de Santa Catalina, de forma sucesiva y hereditaria a sus sobrinos, hijos de su hermano Fernando, don Juan Álvarez de Toledo -1478-1546, arcediano de Écija, canónigo y maestrescuela de la Catedral de Toledo-, y a don Bernardino de Alcaraz, también canónigo y sobrino suyo,  y cuando fallecieren a cualquier nieto de sus hermanas que tuviesen Dignidad o Canonjía en la Catedral de Toledo.    

Desde mediados del siglo XVI la Universidad de Toledo estuvo dotada con veinte cátedras de Artes, Teología, Derecho y Medicina.

Falleció el 5 de septiembre de 1523 en Valladolid.

Tiene calle en Madrid en el Bario de la Leras, junto a la Plaza de Santa Ana y donde estuvieron Las Huertas.

Juan Álvarez Gato y Alvarez Gato (Madrid, ¿1440? - 1509), poeta castellano del Prerrenacimiento perteneciente a la llamada lírica cancioneril.
Cristiano nuevo. Fue armado caballero por Juan II  en 1453. 

Sirvió al rey Enrique IV y después ejerció el cargo de mayordomo de la reina Isabel I. 

Protegido por Beltrán de la Cueva, entró luego al servicio de los poderosos Arias Dávila y al de los Mendoza de Guadalajara; fue amigo del arzobispo de Granada fray Hernando de Talavera.

Sus obras se han conservado a través de un códice de la Real Academia de la Historia y a través de los poemas recogidos en el Cancionero general de Hernando del Castillo. Escribió además doce cartas en prosa de tono ascético y se le atribuye la Vida del arzobispo de Granada, Fray Hernando de Talavera.

Vive en la colación de San Salvador en casas situadas en plena calle Mayor junto a esta Parroquia

El Rey D.Juan II gustó mucho de su comunicación y le honró tanto, que le armó Caballero el
año de 1453, dándole la espada que llevaba ceñida, en cuya memoria la dejó vinculada en su mayorazgo. Yendo el Rey desde Madrid al Pardo á caza y echándole de menos, preguntó por él, y respondiéndole que estaba en Pozuelo de Aravaca á ver su hacienda y que había estado algo indispuesto,
mandó atravesar el camino, diciendo: «Vamos á verle, que es mi amigo yle debemos visitar». 

Envióle después á apaciguar las diferencias que había en Toledo, entre la Ciudad y Pedro López de
Avala, Conde de Fuensalida. 

Sirvió al Rey D.Enrique IV en las guerras de su tiempo, y después
fué Mayordomo de la Reina Doña Isabel; 

casó con Doña Aldonza de Luzón-erróneo, el mismo en un codicilo de su testamento nombra a Catalina como su mujer-.

y murió después del
año de 1495, siendo sepultado en la capilla de Nuestra Señora de la Antigua de la iglesia de San
Salvador. 

No tuvo sucesión, y así el vínculo que fundó fué heredado por el hijo mayor de su hermano.

Escribió varias obras en verso castellano, de que se hallan algunas en el Cancionero general, impreso
en Amberes el año de 1537, dedicadas á vanos señores de aquel tiempo. Además escribió un Cancionero, que se conserva inédito en un Códice de la Biblioteca Nacional de Madrid, y que ha sido
publicado en 1901 por D.Emilio Cotarelo



Casa con Catalina Álvarez de Toledo Zapata,  hija de Fernan Álvarez de Toledo Zapata,  secretario de los Reyes Católicos. Sin hijos hace mayorazgo a su sobrino que renuncia en su hermana María.

FERNÁN ALVAREZ GATO, hijo de Luis Alvarez Gato y de Doña Catalina Alvarez Gato, su muger y deuda. Señores de la Casa de este apellido en Madrid, Caballero Comendador de Villoria en la Orden de Santiago: sirvió con título de Capitán al Rey Don Henrique IV, en compañía de su padre y hermano Juan Alvarez Gato , el Poeta, y se halló en las conquistas de Gibraltar, Algeciras y Tarifa. 
Casó con Elvira Alvarez de Liana, Dama de la Reyna Doña Blanca, 
en quien tuvo á Garci y á Doña María, que heredó la Casa, y 
fué muger de Alonso de Con- 
treras, vecino de Chinchón.  

GARCI ÁLVAREZ GATO, hijo de Fernán Alvarez Gato, Señor de la ilustre Casa de su apellido en Madrid , y de su esposa Elvira Álvarez de Liana, fué Caballero de la Orden de Alcántara, y Capitán de Infantería. Estando sirviendo en Italia , le llamó Dios para otra milicia, y tomó el Hábito de Religioso en la Cartuja de Nápoles, donde no contento con dexar el mundo, y las esperanzas, que le prometía por medio de su tio Juan Alvarez Gato, que servia de Mayordomo á la Reyna Católica, dexó hasta su mismo nombre para no ser conocido , trocando su noble y antiguo apellido por el de Urbano, de que usó todo el tiempo que vivió en la Religión, que fueron 30 años. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario